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Estudiar Marte implica grandes gastos que obligan a la NASA a buscar alternativas

Lourdes Santiago

En el afán de conocer el planeta Marte y su composición se ha gastado miles de millones en la fabricación de diferentes cohetes y lanzaderas que pondrán en órbita naves que son probablemente los elementos más caros empleados en estas expediciones.

La NASA está consciente de los impresionantes gastos que implica toda una expedición a Marte. Por ello, ese espacio donde están estudiando la forma más eficiente y sobre todo la más económica de traer las muestras de Marte a la Tierra busca alternativas para sobrellevar los costos.

El avance tecnológico ha permitido que los diferentes aparatos de exploración aporten imágenes de lo que ocurre en marte y también mediante ellos se han adquirido algunas muestras del suelo de este planeta para estudiarlas. Lamentablemente para la ciencia, traerlas de un planeta a otro implica un enorme gasto, por eso la agencia espacial americana requiere de aliarse con otras compañías privadas para mejorar sus diseños y conseguir una reducción de los costos de los elementos que traerán de vuelta esas piezas destinadas al estudio.

Llegar a Marte es una tarea sumamente complicada, incluso la empresa SpaceX ha hecho varios intentos por poner en marcha su famosa nave espacial con la que quiere llegar al planeta rojo. Otras agencias espaciales han demostrado también un un gran interés en seguir explorando la superficie marciana, pero para eso se necesita tener muestras físicas de su composición. La NASA lleva mucho tiempo detrás de esta posibilidad, pero tras los gastos realizados, ahora busca socios con los que pueda conseguir traer a la tierra las muestras obtenidas por sus sondas.

Para tratar de lograr continuar con las investigaciones de este famoso planeta, ha habido diversas propuestas que van desde la creación de cohetes mucho más ligeros y sencillos de mandar al espacio para traer esas muestras de aire, polvo y tierra hasta la revisión de diferentes elementos de los módulos enviados para modificar ciertas partes y así ahorrar algunos millones en su producción.

A pesar de las circunstancias, la NASA está muy interesada en seguir estudiando Marte y dar con una solución más sencilla para obtener más datos del planeta rojo con el fin de estudiarlo y tal vez de habitarlo en un futuro cada vez más cercano.

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