Trabajar para la preservación del legado cultural y natural de Chiapas es, un gran compromiso que la gente y sus autoridades han asumido con responsabilidad. El paradigma para dejar atrás rezago y marginación ha estado cambiando la forma de participación de la ciudadanía.
Ahora hay una mayor responsabilidad con la preservación y uso racional de nuestro medio ambiente, así como la conservación de nuestros vestigios rupestres, la riqueza de la gran arqueología de zoques, olmecas y mayas, las ciudades coloniales que son un imán para atraer a los visitantes del mundo entero.
Por ese motivo, en este gobierno de Rutilio Escandón Cadenas, se ha venido trabajando en la conservación de las edificaciones coloniales que son el asombro de los turistas. Al mismo tiempo se cuida la limpieza del símbolo de nuestro estado: el Cañón del Sumidero. Ahora, sin la basura de otros tiempos, luce más imponente y es el asombro de propios y extraños.
Por supuesto que muchos de los municipios ribereños deben de aplicarse para evitar que los residuos lleguen a este imponente afluente. Ese es un exhorto que cotidianamente les hace el mandatario estatal porque al evitar contaminarlo, también se está permitiendo que otros pueblos -ríos abajo- puedan tener una fuente de aprovisionamiento más limpio.
Si bien la basura que llega al Cañón del Sumidero en gran parte de la erosión hídrica, algunos ayuntamientos, no todos, han empezado a reforestar los sitios cercanos a la ribera para frenar el arrastre de tierra, piedras, lodo, ramas, hojas e incluso animales muertos. Si se prosigue con esto programas conservación, nuestros afluentes se irán saneando y tener más disponibilidad de agua para el consumo humano.
Durante esto dos tercios de la administración escandonistas, son muchas la edificaciones religiosas que han recibido mantenimiento y se han restaurado después de los sismos de hace algunos años que obligó a cerrarlos y que ahora, se pueden disfrutar a plenitud. Cambiarle el rostro a la entidad requiere de un poco más tiempo e inversión.
Para la celebración de los fieles difuntos, muchos panteones en casi todos los municipios, han sido remozados para recibir a la importante afluencia de gente que después de la pandemia empieza a retomar sus tradiciones. Por supuesto que hay que mantener los cuidados para evitar contagiarse de Covid 19, influenza o algunas otras enfermedades respiratorias propias de la temporada.
Como siempre, el llamado del mandatario estatal es celebrar esta tradición ancestral en paz y armonía, respetando las disposiciones que han tomado las autoridades y diversas instituciones de las tres instancias de gobierno para que la celebración sea con un saldo blanco.
Para quienes se trasladen por las diversas carreteras y caminos de Chiapas se les pide que manejen con precaución, sin fatiga o bajo los influjos de algún medicamento, licor o alguna otra sustancia para evitar accidentes que en muchas ocasiones enlutasen a las familias y hasta las comunidades.
Ahora, se puede acudir a los templos que recibieron mantenimiento y algunos otros trabajos de remodelación, como la hacen mucha gente por estas fechas de los fieles difuntos, en el que los pueblos originarios de México honra la tradición ancestral del mítico Mictlán o inframundo y que preservamos como parte de nuestra identidad cultural.
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